Por Vivian Palmbaum @vivi_pal / imagen por Julieta Lopresto Palermo
La semana pasada se inició el plan de lucha por la Emergencia Alimentaria y las necesidades de los sectores más vulnerables, acordado por los movimientos sociales, con una primera jornada de movilizaciones y ollas populares. Concertado por las organizaciones que se dieron en llamar el triunvirato piquetero: CTEP, CCC y Barrios de Pie, junto al Frente Popular Darío Santillán, lleva como objetivo enfrentar las políticas de ajuste y visibilizar las crecientes necesidades que golpean directamente al sector más informal de la economía.
Movimientos en lucha
El 10 de noviembre pasado en la delegación CTEP Capital los movimientos populares acordaron un plan de lucha bajo la consigna: “Sin tierra, techo y trabajo el ajuste es contra los de abajo”. Entre las principales medidas se anunció:
- 15/11 Movilización a los centros de referencia en todo el país. Ollas populares desde las 7 hs. en el Obelisco y cierre 18 hs. en Congreso.
- 22/11 Movilización al Ministerio de Agroindustria de los productores de la Agricultura Familiar. Marcha Cartonera en contra de la incineración y a favor de la Ley de Envases.
- 24/11 Marchamos en el día internacional contra la violencia hacia las mujeres.
- Gran movilización contra las reformas y presentación de la Ley de Economía Popular.
- Nos manifestaremos en contra de la Conferencia de la OMC en el país.
En la CTEP, Esteban Gringo Castro, secretario general de CTEP, enfatizó que: “Los Movimientos Populares, manteniendo la unidad en la lucha, volvemos a la calle para manifestarnos en contra de las reformas que propone el Gobierno, porque van en contra de los trabajadores y excluyen a la Economía Popular. La agenda social está ausente y es necesario que visibilicemos los problemas que vive el sector. Vamos por la Ley de Emergencia Alimentaria y por una ley integral para los trabajadores y trabajadoras de la Economía Popular”.
Fue así que se concretaron, el pasado miércoles 15 de noviembre, miles de ollas populares a lo largo y ancho del país, que las organizaciones y movimientos populares organizaron para visibilizar sus reclamos y denunciar el carácter antipopular de la reforma laboral que busca barrer con las conquistas del pueblo trabajador.
No son cifras, son personas
El Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana, ISEPCi, acaba de presentar junto a la organización Barrios de Pie el Índice Barrial de la Situación Nutricional que arroja datos alarmantes recogidos en comedores y merenderos de diferentes barrios en situación de alta vulnerabilidad socio-sanitaria, de 33 distritos del conurbano bonaerense, que se realizó durante los meses de septiembre y octubre de este año. Tal como se expresa en el informe se midieron y pesaron 17.692 niños y adolescentes de 0 a 19 años, lo que permitió realizar detección precoz de Malnutrición. Los datos encontrados permiten detectar el aumento de personas que han comenzado a asistir a comedores y merenderos.
Sobre un total de 15.704 niños y adolescentes de 2 a 19 años, el 48% (7512), se encuentran en alguna de las variantes de malnutrición, destacando la preeminencia de los indicadores por exceso, sobrepeso 24% y obesidad 22%, mientras que en bajo peso encontramos un 2% (275 niños y adolescentes). http://isepci.org.ar/2017/11/13/fuerte-aumento-la-malnutricion-conurbano-bonaerense/
En esta franja etaria la malnutrición se incrementó en el conurbano bonaerense entre el primer y segundo semestre del presente año del 39 al 48%, con aumentos significativos en sobrepeso (18 a 24%) y obesidad (18 a 22%), mientras que el bajo peso descendió del 3 al 2% dentro del total de los relevados.
Para un total de 1.710 lactantes, de 0 a 2 años, el 29% (501 niños), presentan malnutrición, con indicadores antropométricos que dan cuenta que estos niños estarían recibiendo una alimentación inadecuada: por déficit 3% de bajo peso, mientras que los indicadores por exceso presentan un 13% de sobrepeso y 13% de obesidad. También aparecen un 20% de niños (331 niños) que presentan acortamiento (baja talla) para su edad, mientras que un 12% (209 niños) están en riesgo de baja talla. La baja talla permite identificar niños con retardo en el crecimiento debido a un prolongado aporte insuficiente de nutrientes o enfermedades recurrentes.
En el conurbano bonaerense es donde vive el 25% de la población argentina y se concentran el 50% de los pobres y el 57% de los indigentes de todo el país. En esa porción geográfica más de un millón de personas no tienen recursos suficientes para adquirir los productos de la Canasta Básica de Alimentos.
El informe finaliza con conclusiones que muestran la impostergable necesidad de declarar la Emergencia Alimentaria y que fundamentan de manera concluyente un plan de lucha de los movimientos sociales en contra del hambre, a las que se ven condenados por las políticas públicas del gobierno nacional.
La lucha sigue
El próximo miércoles 22 de noviembre se espera una nueva jornada de protesta con una movilización al Ministerio de Agroindustria de los productores de la Agricultura Familiar, una marcha cartonera en contra de la incineración y a favor de una Ley de Envases inclusiva, para visibilizar las necesidades de los trabajadores de la economía popular.
Mientras se avanza con la reforma laboral que arrasa con las históricas conquistas de la clase trabajadora, se condena a nuestras mayores a la indigencia, medidas a las que gobernadores y sindicalistas le ponen la firma. Mientras tanto las necesidades se enfrentan en cada territorio con la creciente organización de los movimientos que pelean contra el hambre y la soledad a la que este sistema intenta condenar a las personas.
Claramente los trabajadores de la economía popular aparecen hoy como sector más vulnerable y a la vez el más decidido a organizarse para enfrentar las políticas públicas de ajuste del gobierno nacional.