Por Darío Cavacini
Quinta entrega de “Poetas Internados, poesía libre”. Trabajo documental que surge de la pregunta acerca del valor que adquiere la poesía en contextos de encierro tales como los manicomios, donde la creatividad se confronta diariamente con el exceso de psicofármacos y la inspiración parece brotar como respuesta al abandono y la desidia propios de este tipo de lugares.
Hombre mirando al sudeste rompió moldes y al romperlos, inevitablemente, los modificó. Dirigida por Enrique Piñeyro y filmada en el hospital Borda, fue la primer película de la industria nacional en poner en cuestionamiento ante un público masivo, los conceptos de normalidad y locura. En una escena, Rantés –un paciente que decía ser extraterrestre- le mostraba a su psiquiatra la pared de un pabellón derruido desde donde asomaba un árbol, al mismo tiempo que señalaba “crecen árboles raros acá”. En ese mismo lugar, donde el Frente de Artistas del Borda (FAB) realizaba sus talleres artísticos, comenzaría la historia de Fernando Aquino con la poesía. Su primera experiencia de internación, a los 24 años, sería el puntapié inicial.
Estar internado es, en muchos casos, estar condenado a reclusión perpetua, pero sin haber cometido crimen alguno. Es perder el sentido hasta volverte dócil, sumiso. La imposibilidad de decidir sobre las acciones de tu propia vida te vuelve frágil, transformándote en cristal: “Estar acá es una basura, es parecido a un campo de concentración; cuando yo estaba había que buscar la comida con un tacho y nadie te explicaba nada”. Agrega con amargura que ingresar al manicomio y observar el estado en que están el resto de los pacientes, te lleva a pensar que no vas a salir nunca más, que el encierro va a ser eterno.
Como suele suceder, cada vez que se sale de una internación, hay que empezar a recomponerse de una experiencia que se supone debería mejorar el estado de una persona. Recuperarse de la recuperación. Superar los estigmas y las dificultades de una internación no es fácil. Él supo cómo, sin pretender descubrir la pólvora, afirma que fue el arte lo que lo salvó. Esa fuerza vital le permitió conectarse con su propio mundo y perderle el miedo. Su proceso implicó una transformación interna muy profunda, sumergiéndose en lo más íntimo de él mismo. Empezó recuperando la palabra en el taller de letras del propio FAB, leyendo, escribiendo, recitando. Un tiempo después intentó reconquistar el dominio de su cuerpo en el taller de mimo, superando el abatimiento que el manicomio le proveía cada día. La prueba final fue en el taller de teatro, donde el cuerpo y la palabra se unifican.
Esos primeros escritos eran deformaciones de poemas que leían en el taller, mutilaciones de obras célebres que rearmaba a su manera para resignificarlas y hacerlas estallar en infinitos sentidos. Luego llegarían los días de hacer poesías sobre las miserias del hospicio, verdaderos escritos de resistencia antipsiquiátrica : “…Cuando te vuelvan dócil, te das cuenta que eres débil…” “…Ahora llego el arte del encierro, las leyes nos avalan…” “…Veo Cristos por todos lados, acá quedaron sin escalera para subir al cielo”. Esos pequeños fragmentos (que recita de memoria) muestran cómo el arte lo ayudó a combatir y liberarse de la perversa lógica manicomial que lo mantuvo cautivo durante algunos años.
Con la fortaleza propia de quien resurgió desde el fondo de la nada para cuestionar el todo cotidiano, rememora la época en la que escribía sobre el futuro y la tecnología bajo el seudónimo de Axius Xismena de Sagradan: “En el 2001 empecé a escribir de forma hermética, todo muy futurista, dándome cuenta del despertar de las cosas, de cómo existe el avance en todos lados y que simplemente no queremos avanzar, estamos dormidos para no avanzar”. Sin veladuras afirma que los manicomios son centros para el no avance. Un verdadero espejo que te muestra la realidad del mundo exterior y lo que es el poder y el loco, el gobernante y el pueblo, “es lo mismo que el afuera en ese sentido, el de arriba pisa al de abajo”.
El relato vivido de su viaje interno sería lo siguiente en su creación literaria, con la decodificación poética de su propio misticismo pretendía convertirse en una mapa para todo aquel que necesitara una guía y mitigar así el dolor que supone enfrentarse a lo desconocido de cada uno: “La vida tiene que ver mucho con la imaginación, ésta con lo mágico y todo a su vez con lo fantástico. Quizás todo sea parte de lo invisible que está pasando exactamente en este momento y no podemos verlo, solo percibirlo a través de los sentidos e intentar transformarlo en arte”. La búsqueda constante por darle sentido a aquello que nos habita, para lo cual sólo existen el silencio y la desesperación, sigue siendo la brújula que orienta su creatividad, autoproclamándose un profesor de la mal llamada locura, un “canalizador de extrañeses”.
Su concepción de la “locura” se asemeja mucho más a la del mundo chamánico que a la de la medicina occidental que considera a las alucinaciones, los delirios o el negativismo extremo como síntomas de una enfermedad que tienen que ser erradicados a base de psicofármacos. Mientras que para la primera en cambio son el reflejo de una emergencia espiritual que permite a quien lo vivencia, erigirse como puente comunicacional entre otro nivel de realidad y éste, proveyendo a los vivos la sanación que necesitan. Si esa especial receptividad a un flujo de información e imágenes puede integrarse con nuestro mundo cotidiano, se da a luz a un curandero: “El problema se da cuando esa avalancha se obstruye y queda atrapada dentro, convirtiéndose en un laberinto de difícil salida. Sin la ayuda adecuada que permita alinear esas energías de orígenes diferentes, la persona queda presa del pánico que le generan”.
Ese miedo a lo extraño de uno mismo, a algo que uno nunca vio ni sintió, pero que coexiste dentro de cada individuo, es lo que lleva a escuchar voces ajenas pero propias, a tener visiones poco compartidas que provocan un pesado aislamiento social y confrontan a esa persona con sus temores más oscuros: “Hay gente que se dedica al esoterismo, que son médiums o chamanes y ayudan a esas voces a ir hacia la luz, a encontrarles un sentido, pero hay tipos que terminan muy aterrados por no saber que hacer. Podés tener el mismo viaje que el que está afuera, el tema es cuando el miedo a la locura te hace bajar los brazos de la creatividad, ese miedo también es el de la gente de afuera, el temor al loco y a la locura”.
Transformado en performer y presentador de los espectáculos del FAB, ha recorrido el país con sus presentaciones. En uno de los festivales, internacionales de artistas internados y externados de hospitales psiquiátricos, organizados por el propio FAB, le entregaron un premio por la exhibición de mimo que realizó. La sola evocación de ese hecho le despierta ambivalencia ya que pasaría de la alegría a la desazón en pocas horas. Al regresar a Buenos Aires, su jefe, que había visto la noticia por la TV, lo dejó sin trabajo. Otra vez a morir y renacer. Con voz ronca, casi melancólica, afirma: “Afuera del manicomio la cosa es muy distinta, tenés que manejarte como un camaleón, no podes andar diciéndole a todo el mundo que estuviste en el Borda”. Los estigmas de haber estado internado, una vez más, se le hicieron carne.
Recuperación capilar
(Una materia que debo)
Una caída como al vacío de mi almohada
Una orina en la inmensa llanura brillosa
Junta de sequias áridas y casposas
Respuesta de un botiquín, ya sin peine.
Trucos de químicos que nunca sirvieron.
Enfermedad craneal de contracturas y falta de riego
Con afinidad se afina el autoestima
Y a medida que se afina va desapareciendo.
Sin recursos para pedirle a un chaman el secreto
Como no estar presente en un futuro perfecto
Sin belleza de mujer, realmente sin un vello
Ropero sin ropa, pero lleno de sombreros
Rockerosuperestar en pleno desempleo
Simplemente una alopecíaandrogenetica
Un pelado sin pelo.
4-6-2010
Sin título
Estuve entre los drogadictos y nunca me drogue
Estuve entre los pobres y nunca fui pobre
Estuve entre las estrellas y nunca fui estrella
Estuve entre los desaparecidos y nunca desaparecÍ
Estuve entre los curas y nunca fui cura
Estuve entre los locos y nunca estuve loco
Estuve entre los enfermos y nunca enferme
Estuve en la lucha y nunca luche
Estuve en la guerra y nunca fui
guerrero
Estuve en el mundo y nunca fui del mundo
Estuve entre los humanos y nunca vi humanidad…
Hombre Menstruo (Oración)
Hermano nuestro que nos discriminas
todos los días
Perdona nuestra locura
como nosotros perdonamos la vuestra
no nos dejes caer en el manicomio,
líbranos del hospital.
Padres que están en casa no me abandones
Como al resto
Obligatoria será la palabra, si de la libertad
ese es el precio
venga a nosotros un milagro
que este encierro no sea eterno.
(Gritar en las admisiones de los hospitales 100.000 veces hasta que los padres blancos se arrepientan de su castigo – nunca sucede, antes nos adormecen, igual ¡AGUANTEN!-).
Sin título
Soy ateo de la cara de curas que tengo
La desolación de esta pantalla
Mas lejos de la biblio merca
Decidi llamarla así / un estante de cortezas
Doña Clorinda marca de los Rayos
Bloqueo el cuarto eléctrico de las sorpresas
Que medio miedo
El cuarto del angel Mery Verden
Y el mensaje que recibo de niña
Bordaovni debo asesinar a la humanidad
Bloque bloqueo block. Spinetta es mi pastilla
Hija de herreros, pon las astillas con la viruta
MATER es MOTHER, Fhader es Faradio
Debo matarlo corrompieron mi VIRGINIDAD
En la casa donde no hay nadie/ nadie tiene la culpa
Habló por hablar el derroche de mi culpa brota
No puedo hacer el pase de nariz raíz
MI DUEÑO MUERE, mi celular es mi personalidad
Siéntese espíritu, mi abuela era culpa a distancia
Cuando te cansas de jugar con el perro y el gato
Continuas con las marmotas
Estas duermen hasta que las despierta
El asesino que llevan dentro
Comiste su falo empeñaste su corazón
Mi reino!! Por un papel. 15.000 dolares
A mis pies.
Hoy tengo un audífono/ éter, eternidad
Shhsss Silencio etero quiere vengarse de mi
Misma, MATE MI ALMA
Estoy mas asolada que la patria de la iglesia
Exigo un representante no soporto mi aborto
Aborté mi mundo, voy con mi nave loca
Chocar contra un asterisco *
CRISTALIZÉ ME HELÉ
VER GENIOSIDAD. Es no hacerme cargo de mi carga.
AXIUS XISMENA de SAGRADAN.
Ciudad Escondida
Un RÍO de SOLEDAD corre por las SIERRAS
Allí donde sale SOL, bien abajo
Donde CRISTAL con sus ojos, cuida a mis hijos
Donde las canillas abiertas, muestran hijos
Está también el sida, que es contagio de oralidad
Sabes que el BARRIO es APELLIDO
De fundación comechingona, de pueblo escondido
Te demuestran la puerta de pisos lunares
Que te pareció el mercurio, echo gotear
No me expliques porque REIS
Me confesas la violación y veo un cuerno prometedor
CELESTE el micrófono de mi voz
NARANJA la semilla que el futuro nos dio
Corro por cañadas y puentes de despegue
800 kilómetros/ corazón del país
Boina militar, figura central
Dónde estabas MARIA PAX? No te despertaste?
ALLÁ esta mi ALMA con su luz de giro en un ojo
Volveré cuando empiece el desastre
30/4/2010