Créditos: Anabella Aranda
Por Anabella Aranda, Martin Dilisio, Ana Laura Gómez. El pasado sábado se realizó el tercer Encuentro Amplio Nacional de Cooperativas Autogestionadas, en la fábrica recuperada IMPA. Participaron más de 60 emprendimientos autogestionados y cooperativas de distintas provincias y de la Ciudad de Buenos Aires, en el esfuerzo de seguir organizando y promoviendo políticas para el sector.
La jornada inició con las palabras de Marianela Navarro del Frente de Organizaciones en Lucha (FOL), Fernando Gómez de la Coop. Selius de La Rioja y Cristian Sánchez de la Coop. Unión de Rosario.
“Nos fuimos encontrando en la lucha por pelear nuestros derechos, nos fuimos organizando y fuimos planteando una programa de reclamos. Muchos trabajadores han pasado 10 años sin tener trabajo, resultado de las políticas de los ´90. Hoy el trabajador autogestionado es un nuevo sujeto, y son necesarias nuevas medidas, nuevas políticas que contengan a estos trabajadores”, remarcaba Fernando Gómez.
Durante la mañana, se recordó la lucha por la defensa de la Línea 1 del PTA (Programa Trabajo Autogestionado) del Ministerio de Trabajo, haciendo referencia al incentivo de $600 mensuales destinado a los trabajadores de cooperativas que el gobierno quiso eliminar, perjudicando a casi veinte mil trabajadores, donde a partir de la lucha en la calle se logró el restablecimiento del subsidio por tres años más.
El eje del Encuentro se centró en la discusión de los acuerdos y aportes que se dieron en los encuentros previos, sintetizados en un documento de trabajo. Se evaluó la necesidad de construir un espacio que construya identidad, que se asiente en algunos principios fundamentales, que se articule a nivel nacional y que permita realizar acciones concretas, partiendo de la base que desde el gobierno se llevan políticas de corte coyuntural pero no hay definiciones de fondo que beneficien al sector. “No nos puede llevar veinte años la lucha por un salario digno”, señaló Cristian de La Unión, remarcando la necesidad de estar unidos y de tomar decisiones que favorezcan a las cooperativas autogestionadas.
A partir de la exposición de las diversas cooperativas, se pusieron en relieve algunas de las problemáticas comunes. Las mismas incluyen desde una relación conflictiva con el Estado, con sus mayores exigencias que derivan en excesivas trabas burocráticas, hasta la necesidad de mayores niveles de capitalización, el aislamiento de algunas cooperativas no enmarcadas en ningún espacio político y la centralización administrativa en la Ciudad de Buenos Aires.
Teniendo en cuenta esta situación, se ha ratificado la importancia del EANCA como espacio de organización alternativa entre cooperativas, y la posibilidad de conformar una Federación como herramienta de lucha contra las políticas de desplazamiento del Estado. En lo particular, se han acordado en una serie de objetivos reivindicativos y orgánicos, tales como la sociabilización de saberes administrativo-contables y productivos, el fortalecimiento de redes de comercialización, y el fortalecimiento de la unidad para generar fuerza en la lucha en las calles, haciendo del espacio una herramienta política independiente.