Por Gabriel Casas
El regreso del torneo largo trae una definición del campeonato que se prolonga y unas fechas que se vienen cargadas de partidos fundamentales. Todo puede pasar en cada fecha y el cronista se lo recuerda a Tévez, que afirmó que en las próximas dos fechas se define el título. ¿Qué pasará?
Voy a escribir estrictamente sobre fútbol aunque haya muñecos que dan temas extra futbolísticos a lo pavote: el resurgir de la novela en la AFA y los mercenarios de Godoy Cruz. Como la entidad (¿?) de la calle Viamonte me dará letra toda la semana y a los barrabravas no hay que darle tanta cabida en sus bravuconadas, vayamos a lo verdaderamente importante.
Cuando uno decía que un torneo largo era lo ideal, para muestra basta un botón. Faltan 8 fechas de 30 y hay cinco equipos con chances de intentar alzarse la corona. Si bien Boca y, ahora en menor medida, San Lorenzo habían sacado un plus de ventaja, nadie puede descartar a Racing y a Rosario Central. Hasta River todavía puede soñar si gana el pendiente… Es que a los de arriba les toca cruzarse entre ellos en lo que resta del certamen.
No nos detengamos tanto en el buen fútbol, porque ahí hay que bucear en aguas turbulentas. Rosario Central es el soplo de aire fesco. Boca es, más que nada, la inspiración de sus solistas. San Lorenzo es el bloque armado por el capitán Bauza. Racing es la solidez del ahora pragmático Cocca. Y River son los restos del campeón de la Copa Libertadores.
O sea, que lo más lindo es que todavía falta lo mejor. Boca-San Lorenzo, River-Boca, Racing-San Lorenzo, Boca-Racing, Huracán-San Lorenzo, San Lorenzo-Rosario Central, Independiente-Racing, Rosario Central-Boca, entre otros. Un menú bastante variado.
Tévez le dio un salto de calidad al fútbol argentino adentro y uno para atrás afuera. Sus declaraciones de que en las próximas dos fechas se define el título (y más en una sin su presencia) me parecen erradas. Esto no es Italia. Donde si la Juventus salía airoso de los clásicos, después marchaba en fila hacia el Scudetto. Boca no le puede garantizar sostener sus dichos.
Pero lo que hace especial al torneo argentino es que cualquiera se le puede animar a cualquiera. Sólo es cuestión de proponérselo. Unión ya lo demostró en La Bombonera in the face de Carlitos. Será como coinciden todos los que vuelven del primer mundo, en eso de lo difícil que es jugar acá.
Así dadas las cosas, creo que se llegará a un final de cabeza a cabeza. Bauza va a especular con eso (algo a lo que los hinchas de San Lorenzo estamos acostumbrados) y se irá contento como perro con dos colas, si se trae un punto de La Boca. Por más que enfrente no estén Tévez, Gago y Calleri. La audacia no es una materia que el Patón haya aprobado en su vida futbolera.
Entonces, Carlitos, no creas tanto que en dos fechas esto puede estar resuelto. En un torneo corto, hoy casi faltaría la mitad del mismo. Y ya deberías haberte dado cuenta de que el certamen argentino is very dificult.