“Jamás palabras por un lado, actos por el otro, sino palabras-acto y actos cargados de sintaxis”. Con esas palabras David Viñas caracterizaba a Rodolfo Walsh, hoy día, una de las más vigentes figuras de nuestra rebelde “generación del setenta”, cuyos textos se leen y releen con similar intensidad que antaño, y con la pasión, el coraje y la ética con la que fueron escritos.
Lograr que la palabra se convierte en una cosa concreta inserta en la realidad material que vivimos. A eso se dedicaba Walsh al escribir. Siguiendo las enseñanzas de su compañero en Prensa Latina, Jorge Ricardo Massetti, parece recordarnos con cada una de sus obras que debemos ser objetivos, sí, pero nunca imparciales, porque nadie decente puede ser imparcial entre el bien y el mal, entre la paz y la guerra, entre un oprimido y un opresor, entre un torturador y un torturado. Por eso sus textos denuncian al Estado, enaltecen la militancia, siempre narran desde la perspectiva de las víctimas.
Y por eso hoy lo recordamos de una manera muy especial, gracias a la desinteresada y compañera idea de los integrantes de la revista Maten al Mensajero y de CJ Cambia y Gonzalo Penas, los creadores de la historieta biográfica RW, que narra su vida en seis capítulos. Una propuesta inédita entre las tantas elaboraciones existentes sobre su recorrido vital.
Hoy Marcha te acerca las primeras cuatro entregas. Desde este lunes hasta el jueves vamos a ir subiendo un capítulo de RW por día, hasta llegar a completar los que ya están publicados. Los últimos dos aparecerán en los próximos números de Maten al Mensajero. Les proponemos no perdérselos.