Más de 80 mil personas marcharon en el marco del Día Internacional de la Mujer. Se manifestaron contra los feminicidios, las desigualdades de género y a favor del aborto legal en todo el país.
Por Carolina Rosales Zeiger / Fotos: Petit Coffy
A Ingrid Escamilla, de 25 años, la asesinó su pareja. Encontraron su cuerpo desollado y difundieron las imágenes en los medios masivos de comunicación. Fátima Aldrighett, de 7 años, fue secuestrada, abusada sexualmente y asesinada cuando salía de la escuela. Su cuerpo fue arrojado dentro de una bolsa plástica. Los feminicidios de Ingrid y Fátima ocurrieron con apenas algunos días de diferencia, en febrero de 2020, en la Ciudad de México. Pero no fueron los únicos: se estima que en todo el país se cometen entre 8 y 10 crímenes de este tipo por día.
Durante 2019, más de 3mil mujeres fueron asesinadas por el hecho de ser mujer. Se registraron más de 4 mil denuncias por abuso sexual y casi mil por acoso. Según los casos registrados oficialmente, además, hubo 1400 casos de violación sexual. Las cifras corresponden al Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
Por eso, en el día de ayer y en el marco de Día Internacional de la Mujer, miles de mexicanas marcharon en distintas ciudades del país en contra de los feminicidios, el acoso, la violencia sexual y la desigualdad. Además, se manifestaron a favor de maternidades libres y por el acceso al aborto legal en todo el territorio nacional: en la actualidad, la interrupción del embarazo está permitida sólo en Ciudad de México y Oaxaca.
“Con falda o pantalón, respétame cabrón” o “Medio vivas aún y más furiosas aún” coreaban algunos contingentes en la marcha que uniría el Monumento de la Revolución –punto de partida– con el Zócalo, en el centro histórico de la Ciudad capitalina. También el célebre “Mujer escucha, esta es tu lucha” sonaba con fuerza cada vez que las columnas pasaban por ventanas o balcones en donde había mujeres observando. Aunque la mayoría de los cánticos hacía alusión a generalidades sin demasiada especificidad o contenido político duro, los reclamos al gobierno de Andrés Manuel López Obrador también se hicieron escuchar. “El Estado no me cuida, me cuidan mis amigas” fue uno de los lemas más repetidos, sobre todo al atravesar los cordones de policías que cercaban algunos espacios del trayecto.
Encabezada por el contingente de madres de mujeres víctimas de feminicidio, pasadas las 14hs la marcha comenzó su recorrido de 2 kilómetros. La enorme columna estuvo dividida, detrás de la cabecera, en madres con hijas menores de 12 años, contingentes de mujeres, organizaciones sociales o políticas y un grupo mixto de varones que acompañaban. Cuando las primeras llegaron al Zócalo, las últimas aún no habían salido del Monumento a la Revolución.
En 2019 la organización había definido a la marcha del 8 de marzo como la más grande en su historia: habían asistido unas 25 mil personas. Este año, el récord superó toda expectativa: las autoridades estimaron que durante toda la jornada participaron más de 80mil.
La finalización sucedió ya entrando el atardecer, cuando las últimas columnas entraron al Zócalo. “Estamos de picnic”, decían algunas en alusión a la tranquilidad y comodidad de la Plaza. Mientras, un pequeño escenario ubicado en el centro intentaba ordenar las llegadas, al tiempo que abría el micrófono para diversas denuncias y manifestaciones. En un sector, algunas montaron una fogata gigante, alimentada por algunas tarimas de madera que estaban en la explanada, pancartas y combustible para alimentar el fuego. Luego, bailaron alrededor de ella.
Para este lunes, toca el silencio: el paro nacional de mujeres mexicanas estima casi un 60% de adhesión. Es la primera convocatoria de este tipo en México, donde las mujeres representan un 40% de la fuerza laboral y donde, a pesar de ello, existe en promedio una brecha salarial entre hombres y mujeres de un 34%, según datos del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred).
Algunos datos de la violencia machista en México:
* Entre 9 y 10 mujeres son asesinadas cada día en el país, según la ONU.
* Veracruz es el Estado más peligroso para las mujeres en la actualidad, registrando 153 víctimas de feminicidio de enero a octubre 2019. Le sigue del Estado de México con 95 casos en el mismo periodo, de acuerdo con el SESNSP.
* De enero a agosto de 2019, 292 mujeres fueron víctimas de abuso sexual en la Ciudad de México; cuatro denuncias son por violación colectiva, según el portal de Datos Abiertos del gobierno capitalino.
* De 2013 a 2018, la sensación de inseguridad de las mujeres pasó de 74.7% a 82.1%, según la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (Envipe).
* Los mismos datos reflejan que las mujeres se sienten más inseguras que los hombres tanto en lugares públicos como en privados: cajero automático en vía pública (87.4%), transporte público (74.2%), calle (72.9%), carretera (69.5%), mercado (65.5%), parques (62.1%), automóvil (48.9%), escuela (39.2%), trabajo (36.2%) y casa (26.7%).
* Las mujeres son las principales víctimas de delitos sexuales: en 2017, la tasa de este delito fue de 2,733 por cada 100,000 mujeres, cifra mayor a la tasa de 1,764 registrada en 2016 por el INEGI.
* La violencia que ejercen parejas, esposos, exnovios o exesposos contra las mujeres en México es "severa y muy severa" en 64.0% de los casos, de acuerdo con la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (Endireh) de 2016.
* El 19.4% de las mujeres de 15 años y más ha enfrentado, por parte de sus parejas, agresiones de daño físico.
* El Estado de México es donde se registra el mayor porcentaje de violencia emocional, económica, física y sexual hacia una mujer por parte de su pareja (53.3% de los casos), seguido de la Ciudad de México (52.6%) y Aguascalientes (49.8%).
* En 2016, cada mujer perdió 29.7 días de trabajo remunerado a causa de la violencia doméstica, estima el INEGI.
* De 100 mujeres entrevistadas por Amnistía Internacional tras su detención, 33 denunciaron haber sido violadas durante el arresto, principalmente por parte de la Marina, Policía Municipal y policías estatales; 72% dijo que sufrió manoseo. De todas ellas, según la organización, las mujeres lesbianas, bisexuales y transgénero corren especial peligro al momento de la detención, pues "son mujeres cuyo cuerpo no se adapta a las normas esperadas de femineidad”.