Por Lucio Garriga Olmo
Las elecciones municipales del domingo pasado en Brasil significaron un duro revés para el PT de Lula y Dilma. El partido de Michel Temer también tuvo una elección mediocre y el principal ganador de la jornada fue el derechista PSDB.
Más de 140 millones de brasileñas y brasileños acudieron el domingo a las urnas para elegir alcaldes, vicealcaldes y concejales en los 5.568 municipios del país. Las elecciones eran una dura prueba para el Partido de los Trabajadores (PT). Fueron el primer llamado a las urnas luego del golpe parlamentario que destituyó a Dilma Rousseff y se desarrollaron en un clima de persecución judicial contra el PT, una ofensiva que busca que Lula no pueda presentarse a las presidenciales de 2018.
De las 26 capitales estatales, el PT sólo alcanzó una victoria en la amazónica Rio Branco (Acre) y competirá en el balotaje del 30 de octubre en Recife (Pernambuco). Pero lo más destacado es que no logró retener la alcaldía de San Pablo, su principal bastión. Su candidato, el alcalde actual Fernando Haddad, obtuvo sólo el 16,70% y la perdió ante el empresario y debutante electoral, Joao Doria, del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), quien consiguió el 53,29% de los votos y logró imponerse en primera vuelta. Por la relevancia política y económica que tiene san Pablo, fue el resultado más llamativo y sorprendente de la jornada. Doria es un multimillonario que condujo en 2008 el reality show “El Aprendiz”, creado en Estados Unidos por el hoy candidato republicano Donald Trump. Por su parte, el Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), el partido del presidente Michel Temer, terminó en cuarto lugar con un escaso 10,14%.
Con la victoria de los tucanes en San Pablo, se fortalece el PSDB a nivel nacional, y catapulta para las presidenciales de 2018 al mentor político de Doria y actual gobernador del estado, Geraldo Alckmin. Por su parte, el ex candidato a presidente, actual senador y presidente del partido, Aécio Neves, afirmó que “el PSDB ha logrado importantes victorias”. No es para menos, teniendo en cuenta que su partido gobernará una de las ciudades más importantes de América Latina.
El PT llegaba a estas elecciones golpeado, por los coletazos del golpe de Estado y por las investigaciones de corrupción que derivaron en nuevas detenciones a dirigentes de este partido. En las últimas elecciones municipales, realizadas en 2012, el PT fue el partido más exitoso cuando consiguió 640 alcaldías. Ahora apenas mantuvo la alcaldía de Rio Braco y disputará la segunda vuelta en Recife, capital de Pernambuco.
Otro ejemplo de esta crisis del PT es que en aquel año presentó 42.600 candidatos para concejales. En estos comicios, incluyendo alcaldes y concejales, presentó sólo 24.200.
El partido del presidente Michel Temer también sufrió un revés en estas elecciones. En Río de Janeiro, su candidato Pedro Paulo no pudo entrar a la segunda vuelta al obtener un 16,12%, quedando en tercer lugar. El pastor conservador Crivella, quien consiguió el 27,78% de los votos, y el candidato del PSOL, Marcelo Freixo (18,26%), un duro crítico de Temer, disputarán la segunda vuelta el próximo 30 de octubre. Al PT también le fue mal, apoyó a la candidata del Partido Comunista Jandira Feghali, quien consiguió un escaso 3,34% de los sufragios.
Ante los militantes que festejaban el pase a segunda vuelta, Freixo manifestó: “Derrotamos al PMDB en honor a la democracia brasilera”. En esta ciudad, el ausentismo, los votos en blanco y los votos nulos significaron el 33% del total de votos. Una estadística llamativa que refleja el descontento de la sociedad con la clase política en general.
La ciudad sureña de Porto Alegre también fue un golpe para el PT y una victoria parcial para el PSDB, ya que habrá segunda vuelta. Nelson Marchezan Junior (PSDB) obtuvo el 29,84% y disputará la segunda vuelta con el candidato del PMDB, Sebastiao Melo, quien alcanzó el 25,93% de los votos. De esta manera, será la primera vez en la historia que habrá un tucano en segunda vuelta en Porto Alegre. El candidato petista, Raul Pont, quedó tercero con un 16,37%.
En Salvador, la capital de Bahía y la ciudad más grande del Noreste brasileño, la alcaldía la retuvo con el 73,99% de los votos el conservador Antonio Carlos Magalhaes del partido Demócratas, quien aparece como fuerte candidato a gobernador en 2018. En esta ciudad, el PT apoyó a Alice Portugal, del Partido Comunista, quien salió segunda con un 14,55% de los votos.
En Recife, capital del estado de Pernambuco, habrá segunda vuelta entre Geraldo Julio (PSB) que alcanzó el 49,34% y el petista Joao Paulo que obtuvo el 23,76%. En Belo Horizonte, capital de Minas Gerais, también habrá segunda vuelta. El candidato del PSDB, Joao Leite, consiguió el 33,40% y enfrentará al candidato del Partido Humanista de la Solidaridad (PHS) Kalil que alcanzó el 26,56%.
Cabe recordar que estas elecciones se desarrollaron en un clima tenso marcado por la violencia que azotó a los candidatos durante toda la campaña electoral. Unos 20 candidatos fueron asesinados en los últimos meses, más de la mitad de ellos en el estado de Río de Janeiro. Debido a esto se desplegaron 25 mil militares en 448 ciudades de 16 estados.
El presidente del Tribunal Supremo Electoral, Gilmar Mendes, afirmó en la previa que estas elecciones eran “las más violentas” de los últimos años y puso especial énfasis en Río de Janeiro “donde el crimen organizado, las milicias y los narcotraficantes participan en el escrutinio y tienen candidatos”.